Por desgracia no pude disfrutar de tu fútbol, de tu entrega, de tu pasión, de tu nervio, de tu MADRIDISMO. Y eso es lo que eras (y seguiras siendo), un madridista de los que ya apenas quedan. Cualquier homenaje es poco para agradecerte tu compromiso con nuestra camiseta, tu lucha y tu garra.
Gracias por regalarnos aquellos momentos de gloria, de ira y de emoción, gracias desde el corazon de un servidor que no llego a verte jugar. Espero que alla donde estes, sientas el calor de miles de personas coreando tu nombre hoy y siempre...
10/XI/1954 - 02/IV/1992
Siempre en nuestros corazones